Unos cuantos tebeos para abrir boca, que hoy es miércoles.
- Asa, el Ejecutor 8 (Koike/Kojima). Continua la obra en la que Koike nos habla de las costumbres y filosofía japonesa de la época de los samurais, con cierto toque de fábula moralista. En este número nos podemos sorprender al saber que un samurai no se puede ofender si le llamas feo (pero cuidadín con llamarle cobarde); que un verdugo como el protagonista puede estar totalmente en contra de la pena de muerte, y seguir haciendo su trabajo porque es su deber; o que se puede putear a las clases inferiores, pero hasta cierto punto. Los dibujos de Kojima y su sentido de la narrativa, como siempre, soberbios. Mi nota: 4
- Los Defensores: Les llamaban... Los Defensores (Giffen/DeMatteis/Maguire). Del mismo equipo creativo que a mediados de los '80 creó con la Liga de la Justicia un nuevo género en los comics, las comedias de situación de superhéroes, llega esta miniserie, que Panini recopila en un solo tomo. Los Defensores eran un grupo de superhéroes Marvel de lo más atípico: no tenían casi nada en común unos con otros. Hulk, el Dr.Extraño, Namor y Estela Plateada, de caractéres a menudo enfrentados, protagonizaron unos cuantos números del título original The Defenders de principio de los '70, hasta que se les unieron otros héroes que dieron cohexión al grupo. Bien, pues este es el grupo que Giffen, DeMatteis y Maguire han recuperado, un grupo que no quieren saber nada los unos de los otros. La historia comienza con el Dr. Extraño recibiendo un chivatazo extradimensional que le pone en aviso de un intento de su archienemigo, Dormammu, de obtener un poder que le haría convertirse en un dios supremo con poder para alterar la realidad. Para enfrentarse a ello, Extraño reúne a sus antiguos compañeros, Hulk y Namor (Estela Plateada se niega a acudir porque está surfeando... ¿existe una excusa mejor?). Entre peleas que recuerdan al Supergrupo de Superlópez, van a la dimensión de Dormammu para solucionarlo todo. Aunque en las obras de este equipo la aventura es casi lo de menos, esta entretenida. Los diálogos, que son su fuerte, no han perdido fuerza, pero tampoco han ganado, porque en muchas ocasiones son chistes ya empleados anteriormente, como la broma recurrente de las réplicas que los subordinados les hacen a sus malignos amos o cuando un personaje habla demasiado ampulosamente los otros se descojonan. En cuanto al dibujo, creo que es lo mejorcito que le he visto a Guiffen, se ha superado. Muy detallado, sin perder el sentido de las proporciones, y, lo que le hace más valedero en una obra como esta, el registro de expresiones faciales más amplio del mundo del comic de superhéroes. Además de todo esto, la Masa folla. Mi nota: 3
- Bone 46 (Jeff Smith). Pasito a pasito va avanzando esta serie de aventuras al más puro estilo Tolkien, con toques de humor. Y digo lo de "pasito a pasito" porque, a parte de que ya de por sí es una obra de acción bastante lenta y con pocas páginas por número (tan solo 16), la irregularidad de su periodicidad hace que te pierdas en la trama y tengas que releer los números anteriores. Eso unido a otros fallos editoriales, como los que han ocurrido en números pasados en la paginación, y la falta comunicación con el lector en sus propios tebeos, obliga a dar una colleja virtual a Dude Comics, aunque me consta que muchos de sus errores se deben a la mala suerte. Menos mal que se anuncia otra edición de este tebeo por Astiberri, en tomos y a color. De todas formas, terminaré la colección de Dude, que ya les queda poco. En cuanto al tebeo en sí, la historia mola, es original dentro del género y los dibujos están dabuty, con mucha influencia de las tiras de prensa clásicas (sobre todo de Pogo) y el cartoon. Mi nota: 4
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